12/11/14

Con casi 14...

Camino


Con casi 14... a mediados de Junio y todo el verano por delante... Septiembre quedaba lejos.
Una vieja bicicleta, la de todos los años y que se iba quedando pequeña, aunque no su aguante. Miles de caminos que recorrer, explorar ese mundo distinto y diferente al acostumbrado. Andanzas y correrías llenas de travesuras sin malicia.
Todo no podían ser penurias! Ni que decir tiene que ser hijo de emigrantes tiene estas cosas, que muchos lo vivieron al igual que yo. Vivir con el corazón entre dos mundos tan diferentes pero enormemente agradecido a la vida porque fuera así y todo lo que me ha dado.
Un nuevo día, un nuevo plan, una aventura mas...
Las horribles gafas de pasta, tan de moda hoy día, desaparecían cuando ellas aparecían.
Sus ojos y sus sonrisas lo llenaban, aún mas si cabe, todo el espacio. Los míos se perdían entre el polvo del camino y sus piernas.
Tabaco no nos faltaba, edad para fumar si... Traje de baño a modo de "gayumbo" para el chapuzón diario. Un vaquero hecho trizas y cortado para el verano, ...un verano de tonos amarillos mas que azul. Aquí la mar por la tele, ...quien la tenía. Eso si, el agua helada de manantial y el fango del fondo no nos quitaban las ganas.
El molino, sin molino, servía lo mismo para el lavado de sabanas blancas, la merienda improvisada con baño incluido o una tarde de pesca. Todo se llenaba de un blanco intenso y olor a jabón de taco.Las sábanas puestas a secar al sol sobre matorrales de brezo y donde la luz del sol deslumbraba en ellas mas que el propio sol. Había todo un ritual de secado por parte de las abuelas. Cubos de agua esparcidos con las manos sobre las sábanas casi secas...
A veces me pierdo entre caminos polvorientos, quizás intentando recuperar un aliento de todo aquello que se fue, la luz que todo lo envolvía, casi mágica... con casi 14.