"Fueron años duros, donde todo escaseaba,
con pocas señales en una realidad vencida y derrotada.
Hasta las ideas eran decapitadas,
donde lo bueno se hacía ver malo,
y lo necesario no era precisamente lo mejor.
Poco ha cambiado desde entonces cuando la historia
se repite una y mil veces."
Que manera de fundir pasado y presente. Además de trasladarnos en este tiempo del no tiempo.
ResponderEliminar¡Gracias Juanjo! Sigues siendo una brisa refrescante en mis amaneceres.
Parece una ermita o algo de epoca similar... me gusta mucho este tipo de templos por decirlo de alguna manera... muchos tiros pegados dentro de ellos, muchas historias y viejas leyendas con aire a romanticismo puro y duro.
ResponderEliminarFabulosas imagenes Juanjo... cuidate amigo...
Excelentes crónicas Juanjo.
ResponderEliminarHas conseguido que las piedras hablen!!
Un abrazo
El alma de las piedras en la meseta castellana.
ResponderEliminarDe esos tallistas ya no quedan.
Geniales tomas y encuadres.
Un abrazo.
Magnificas tomas Juanjo, y del texto solo decirte que tienes mucha razón.
ResponderEliminarUn abrazo!
Muy buenas composiciones para mostrarnos, tanto el edificio, como su entorno próximo y lejano. Transmites toda la sensación de fuerza, y resistencia de esos edificios románicos de gruesos muros graníticos y contrafuertes poderosos. Un abrazo,
ResponderEliminarLamentablemente la historia se repite...
ResponderEliminarGran serie amigo.
Un beso.
Bardzo w moim guście - piękne kadry
ResponderEliminarpozdrawiam
Iwona
Luces y colores naturales, unas tomas simples y sin embargo con fuerza y llenas de historia. Enhorabuena y abrazos desde Sevilla.
ResponderEliminar¿Qué historias nos contaría esa ermita en medio del campo si pudiera hablar? Como siempre procesado, nitidez, color y todo lo demás de lujo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una gozada, Juanjo.
ResponderEliminarY una pena de ver estas edificaciones abandonadas viejas y maltrechas.
Dan ganas de pegar la oreja en las paredes y sentir lo que nos cuentan.
Me gusta sobre todo la primera imagen. La luz y el procesado la convierten en una fantástica fotografía.
ResponderEliminarLa reflexión sobre los ciclos y sus repeticiones me parece muy acertada. Lo peor de todo es que a veces se repiten por que no aprendemos de los errores.
Un abrazo, Juanjo.
La sobriedad llevada a la fotografía; llanuras y estepan que forjan un determinado carácter. Una delicia ver las imágenes. Un abrazo.
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